Los Cantores del Alba
Su historia…
Los Cantores del Alba nacieron artísticamente en noviembre de 1958, en la casa de Pajarito Velarde, y una turista que se encontraba allí sugirió el nombre para el conjunto al escucharles cantar la siguiente copla popular:
Las aves cantan al alba,
yo canto al atardecer,
ellas cantan porque saben,
yo canto para aprender.
Los primeros integrantes fueron Gilberto Vaca, Tomás Campos y Jorge Cafrune, que habían formado parte de Las Voces del Huayra, pero Cafrune a los tres meses se retiró, incorporándose Javier Pantaleón y Alberto González Lobo.
Este conjunto, uno de los más castigados por el infortunio (entre 1978 y 2001, salvo Santiago Escobar, murieron todos sus principales integrantes) estuvo conformado en su formación estable desde sus inicios por:
Tomás Estanislao “Tutú” Campos (Nac. en Urundel, Salta, 7-jul-1940 y fall. en Villa Gesell, Buenos Aires, el 4-ene-2001)
Gilberto Francisco “Gordo” Vaca (Nac. 1937, fall. en Salta, 8-nov-1986)
Javier Edgar “Pato” Pantaleón (La Quiaca, Jujuy 6-may-1941, fall. Salta, 31-jul-1978), y
Alberto González Lobo, reemplazado en ocasiones por Jorge Cafrune.
En 1959 Los Cantores del Alba realizan su primera grabación, y luego de grabar por segunda vez Alberto González Lobo es sustituido por Horacio Aguirre, como primera guitarra y segunda voz.
Lograron un estilo inconfundible, con voces potentes y expresivas, con arreglos sencillos pero representativos del canto salteño, y sobre todo por su manera de cantar las bagualas y vidalas, como un grito desgarrador.
Al poco tiempo de su creación ya eran conocidos en todo el país. Un conjunto que le gustaba mucho a la gente, por lo cual eran muy solicitados para participar en casi todos los festivales de folclore.
En 1965 Tomás Campos retoma su carrera como solista, desvinculándose del conjunto, y entra en su lugar Santiago Escobar, que formaba parte de Los Gauchos de Güemes. Este salteño, que había sido primera voz de "Los Gauchos de Güemes", tenía apenas 21 años, lo que provocó que tuvieran que pedir la autorización paterna para que pudiera salir del país para su debut en Montevideo. Es interesante destacar que Tutú Campos, si bien integraba el conjunto, en todo momento siguió grabando como solista, cosa que había empezado a hacer ya desde que era integrante de "Las Voces del Huayra", por mediación de Waldo de los Ríos. Hacia 1962, Campos ya llevaba grabados tres LP para el sello Columbia, mientras que el grupo grababa por aquel entonces en Music Hall.
Javier Pantaleón, Tutú Campos, Horacio Aguirre y Santiago Escobar fueron las voces agudas de los Cantores del Alba, en especial la capacidad bagualera de Pantaleón y Escobar. Horacio Aguirre fue el músico y primera guitarra del conjunto, creador de éxitos como El que toca nunca baila y Serenata otoñal con Hugo Alarcón, Soñadora del carnaval con Alberto Agesta, Lamento mataco con Vaca y Polanco, Que nunca falte esta zamba, Tocamelo una chacarera con Pantaleón, etc. Los bajos fueron Gilberto Vaca y en sus comienzos González Lobo y Cafrune.
Sus inicios fueron particularmente con zambas carperas y takiraris, dada la fuerza del conjunto, con el tiempo incursionaron en las serenatas y valses y finalmente adoptaron como propias canciones del folklore mexicano.
El debut profesional de Los Cantores fue en Salta en la Casa de la Cultura, luego las presentaciones en las radios y televisión de Buenos Aires. Viajaron por Europa, Japón y Estados Unidos. Grabaron su primer LP en 1959.
Con esta nueva formación Los Cantores del Alba grabaron "Salta Carpera", "Mas Cantores", "Cantemos Folklore" con el Coro Infantil del Teatro Colón, entre otros.
Tutú vuelve en septiembre de 1968. En ese año graban un LP llamado Valses y Serenatas, con temas como "Puentecito de mi río" y "Mantelito blanco". En este disco "Versos de un Estudiante" y "Llora Corazón" cuentan con la voz de Tomás Campos, que vuelve a formar parte del conjunto, y los otros diez temas son cantados por Escobar.
En 1970 Los Cantores del Alba realizan su primera gira por Europa, recorriendo España, Francia e Inglaterra. Los ingleses los consideraron como el mejor conjunto de música extranjera y grabaron para la BBC de Londres un especial junto a Los Rolling Stones.
Como consecuencia del éxito obtenido por su primera grabación de Valses y Serenatas, realizan una serie de seis volúmenes con el mismo título que fueron apareciendo sucesivamente hasta 1975. En ellos aparecen títulos como "Adiós Adiós", "Pajarillo", "La lancha del amor", "Cuando llora mi guitarra" y "Nuestro Juramento".
En 1975 Los Cantores del Alba incursionan en la música mexicana dando origen a una nueva serie de discos llamada Entre Gauchos y Mariachis, en los cuales incluyeron canciones como "Llegó Borracho el Borracho", "A orillitas del río", "Vuela Paloma", "La Calandria", "Tata Dios", "Yo soy el aventurero", "Sandunga", y "Malagueña Salerosa".
Es interesante acotar que, aun cuando interpretaron estos temas que no pertenecían al folclore argentino, les dieron una coloratura que los hacía parecer como tales. Justamente lo contrario de lo que sucede con otros conjuntos, que cantan zambas como si fuesen baladas...
El 31 de Julio de 1978, en la curva de El Infiernillo, a 25 Km. De Rosario de la Frontera, Javier Pantaleón, encuentra la muerte en un accidente automovilístico. Al morir Pantaleón fue reemplazado por Hugo Cabana Flores en una selección de voces. A pesar de la calidad de Cabana, los Cantores del Alba jamás se recuperaron de la pérdida del bagualero. Fueron muchas las canciones que le dedicaron post-mortem.
Con esta formación Los Cantores del Alba grabaron ocho discos, en los cuales hay temas como "Baguala en fuga de pena", "En cada esquina un cantor", "Padre vino", "Que nunca falte esta zamba", "La parranda larga".
En 1982 se retira Cabana Flores, reemplazándolo Carlos Brizuela, ex integrante de Los Nocheros de Anta.
El 7 de noviembre de 1986, después de haber grabado el disco "América canta en Salta", fallece Gilberto Vaca, uno de los fundadores del conjunto, es reemplazado por Charango Martínez.
Los Cantores del Alba siguen grabando y viajando, dirigiéndose tres veces a Estados Unidos, y también a otros países.
El 25 de Abril de 1992 fallece Horacio Eleodoro Aguirre, creador de canciones memorables como "El que toca nunca baila", "Serenata Otoñal", "Que nunca falte esta zamba", "Tócame una chacarera", y muchas creaciones más, en compañía de Javier Pantaleón, Campos, Vaca, José Ríos, Hugo Alarcón, José Gallardo y otros. Es reemplazado por Julio Argañaraz, proveniente de Las Voces del Alba.
Luego se producen algunas desinteligencias por el nombre del conjunto, que finalmente retoma el nombre, y al cabo de un tiempo muere el hombre nacido en Urundel, Pcia. De Salta, Tomás Campos, la última de las voces fundadoras y primera voz.
El nombre de Los Cantores del Alba pertenece a sus herederos, Sonia Campos e hijos, que con otros integrantes continúan por la senda de los precursores.
Entre los premios logrados por Los Cantores del Alba está el "Mástil de Oro" en 1965, por ser el conjunto de mayor calidad interpretativa, el "Limón de Oro", revelación y consagración en el Festival Internacional de Piriapolis (Uruguay). Fueron nombrados Huéspedes de Honor de la República del Paraguay, en Inglaterra se los eligió como el mejor conjunto extranjero de 1970, y en 1982 fueron declarados Patrimonio Cultural de Salta. Grabaron además en España y Alemania.
Son poseedores de varios discos de oro, y más de 60 grabaciones originales hacen de este conjunto un verdadero tesoro patrimonial de la provincia de Salta.
Fuente: Biografía del Folclore Argentino - Juan Carlos Zamateo



