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Editorial

¿Hasta cuándo...?

 

Les recuerdo algo que escribí hace muchos años, la verdad, pareciera que el tiempo no pasó porque todo sigue igual, o peor... porque hace unos años teníamos un país más rico que el actual.

 

Durante ese tiempo tuvimos gobiernos que nos llevaron a una vida más tranquila, económicamente hablando, que la que vivimos hoy, pero... ¿a qué costo...?

 

Sería muy largo analizar el gobierno de los Kirchner sin caer en lo mismo, muchos vivíamos mejor, pero desvalijaron un país, se llevaron hasta lo que no había. Hoy es considerado uno de los gobiernos más corruptos que nos haya tocado padecer.  Y aquí viene el cambio...

¿Qué cambio? Cambiemos asumió, con el voto del pueblo, la responsabilidad de volver a tener un país digno, donde el trabajo, la salud, la educación y fundamentalmente la economía volvieran a recorrer un camino más justo para así poder sanear todo lo mal que se había hecho.

 

¿Y qué pasó...? Nos engañaron, Mauricio Macri junto a una banda de obsecuentes se encargaron de destruir económicamente a la Argentina, no tuvieron ni el menor signo de arrepentimiento ante tanta mentira que escupieron en la campaña pre electoral.

 

No es que mintieron en algo, mintieron en todo!!!

 

Allí están los archivos para que nadie pueda decir que no pasó... una vergüenza, a tal punto que muchos consideran que este gobierno superó en corrupción al anterior, lo que ya es mucho decir.

 

Llega un momento en que las palabras sobran... tanto se dice y tan poco se hace.

 

Podemos hablar a nivel internacional: guerras, asesinatos, violaciones a los derechos humanos, envenenamiento del mundo...

 

Podemos hablar a nivel nacional: corrupción, negociados empresariales, caretas pidiendo derechos que no les corresponden, piqueteros reales sin trabajo muriéndose de hambre, ellos y sus familias..., inseguridad, hambre, miseria, asesinatos, etc.

 

Podemos hablar a nivel provincial: promesas y mentiras, patoterismo, corrupción, hambre, canasta familiar inalcanzable...

 

Si unimos los niveles:  mundo- país- provincia- pueblo, los hechos no cambian, vale para cualquier nivel.

 

¿Qué nos pasa?¿Bajo qué “orden de cosas” queremos vivir?¿Por qué no protestamos?

 

¡¡¡Cuidado!!! Corremos el serio riesgo de ser esclavos de un mundo anárquico... como pueblo, exijamos  a quienes nos gobiernan menos palabras y más hechos... tal vez nos escuchen.

 

Hasta la  próxima semana

José Tanús

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